Hablas de prosa, de versos y he recordado una cita que transcribo: "para escribir poesía es necesario tener algo que decir; para escribir prosa, esto no es necesario" ¡Sabina Grande!
Yo también pertenezco a ese grupo de los conversadores de mirada fija. Mi pasión es charlar, sobre lo que sea, siempre y cuando las personas en cuestión se sientan grandes y libres ante su pensamiento y pareceres. Y sé, que a pesar de todas las diferencias entre las personas del grupo que se reunirá, incluido vos, me sentiría tremendamente relajada a pesar de las sapiencias varias, del derroche de virtudes y las diferencias de edades. Mi entorno siempre ha oscilado enredado en dos grandes grupos: los más jóvenes que yo que admiraban lo que hacía como si nunca fueran a hacerlo ellos, y el grupo de la madurez, que me envidiaba la jovialidad de mis actos y mi gran carcajada perpetua. Y es que mi mundo es éste. En éste he decidido pillar plaza y quedarme. No nos moverán, decían... A mí tampoco.
Y finalmente, mirarse a los ojos. No podemos mentir, en realidad ya decían los antiguos que los ojos son el espejo del alma y a menos que la vendiéramos al diablo, tendríamos una mirada. ¡Cuántas cosas somos capaces de transmitir con sólo una mirada!
Miradas de ojos inocentes, embriagadores, miradas limpias, sucias, amante. Ojos que miran descaradamente, a modo furtivo, con insolencia, alojando gratitud. Nuestra vida es un conjunto de miradas y en los ojos encontramos el medio de seguir respirando cada instante, cada día, todos los días; porque, ¿qué sería de nosotros si no nos miraran y no pudiéramos ver? Como empezaba...Y finalmente, mirarse a los ojos...
Intento hacer un simple esbozo de mercadería como puedes comprobar, sólo espero que me sepas aceptar el atrevimiento del que me enorgullezco. Quizá necesites leer este correo dos veces para encontrar los significados completos, en la segunda lectura, en este punto, esboza una sonrisa para mí. Me será de gran ayuda, será mi apoyo del día. Nada más fácil y más barato; una simple sonrisa basta. Dame un punto de apoyo y moveré el mundo. Yo sólo necesito un abrazo sincero y una sonrisa.
Y para finalizar, que me puedo quedar dos horas más aquí conversando conmigo misma hasta que lo leas tú...
Ahora sí, me despido, esperando esa sonrisa, ¿aún no la dibujaste? Pues repítela para que no se te olvide nunca sonreír ante mí. Y ahora sí, de nuevo, ¿me das un abrazo? Me da que esta noche lo necesitaré fuerte...
Gracias por el beso, que se acerque volando uno mío y se pose donde prefieras dejarlo morir. Ya me dirás algún día cómo se llama ese cementerio...
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9tCh4GSwUsjhTZXYjSCSf3dMkM3MPQb_kRT8yQhklPwH4gjIllajvmftGFdUy9ucqj0_0I47er52Y9j4E7svXpy-TZPYDOfV_I1zE4YFKWnM9Ksk3s-SNdq8MotQWpLsWLulXLSyd0LBK/s400/snoopy.gif)
1 comentario:
Esperando que mientras tanto no te hayas perdido en las palabras sin encontrar el silencio, eso se parece a una de esas cartas que uno guarda en sus cajones durante años hasta que un día se deja leer otra vez, inesperada. pero ya no desesperada.
Unas buenas noches
:0
Publicar un comentario