No estoy enamorada de tí, pero te regalaría mi primera sonrisa del día sólo por saber a qué sabrá tu piel, a qué sabrá tu piel.
Tu arte; el arrastrar palabras donde te escondes. Sólo por los silencios que dejas caer entre tus secretos, me dejaría engañar cada noche de mi vida. Me dejaría besar, me perdería en tu boca.
Sólo quiero saber qué es estar muy cerca de tí, que tus dedos manejen mi espalda. Haz que crees, yo fingiré también, que aunque mañana nos diga que todo acabó, repetiremos cada vez que nos crucemos de nuevo.
Engáñame a mí también, pero tropiézate conmigo. Engáñame a mí también, pero rómpete conmigo. Engáñame a mí también, tengo envidia de sus celos.
Tus ojos contienen a tu alma, que no se escape más; ciérralos ya o engáñame a mí también. Miénteme cuando no esté contigo.
Engáñame a mí también, hazme un sitio en tu recuerdo. Engáñame a mí también, tengo envidia de sus celos.
Nena Daconte, 2006
16 comentarios:
Precioso y amargo también...
Dime que me quieres aunque me mientas, pero no dejes nunca de decírmelo.
Puedo quererte siempre, siempre que me enseñes tu esencia...
... Mienteme que me encanta! ;)
Muxutxus mi niña!... mi niña de siempre!
Bondagex, mi esencia puede ser imperceptible. La dejo en este blog: en cada palabra, en cada respiración, en cada latido. Si consigues atraparla, te regalo mi corazón.
Merodeador... Ni dudes que intentaré apresarte, soy aquella que necesita una esencia para respirar, ésa, esa soy yo...
Seré en adelante tu bombonita de oxígeno, Bondagex. Te presto también mis venas. Con ellas podrás hacer un lazo y, el día menos pensado, te despertarás y ya no seremos dos, sino tan solo uno.
Aire, aire fresco, aire en la mañana para continuar, para reternerlo al subir las montañas de las horas, para aliviar mi asfixia...
Déjame que te respire hasta que dejes de existir, hasta que estés dentro de mí y allí vivas...
Cada día mi curiosidad es más grande...
Díme qué sientes y cómo lo sientes
Mi curiosidad es tu curiosidad, Bondagex. No es un juego de palabras. Te siento, pero no puedo imaginarte. Tienes mi alma desvelada, mi respiración entrecortada, mi aliento congelado, mis dedos agarrotados. A veces, muchas veces, me acerco a ti, pero me pierdo en tus puntos suspensivos.
Mis puntos, esos no cuentan mi verdad, no te entretengas en ellos, piérdete entre mis suspiros, entre mis vergüenzas y mis gritos. Ahí es dónde vivo, donde puedo ser mi yo más profundo.
Gracias a tí me mantengo aún de pie.Ironías de la vida, no sé nada de tí y me das la vida.
¿Por qué te mantienes de pie gracias a mí, Bondagex? ¿Qué quieres saber de mí? ¿Por qué y cómo te doy la vida?
Quizás demasiadas preguntas. Tal vez no tengan respuesta.
Disfruto mucho contigo y con tu blog, créeme, Bondagex. Tú también me proporcionas aliento, esencia vital. Pero desconozco cuál es el siguiente paso que he de dar.
¿Bondagex, estás ahí?
Creí sentirte, pero noto que ya te has ido.
Aquí estoy, aquí me tienes.Ahora, luego...¿quién sabe?
Aunque tengo tu esencia, no consigo atrapar tu presencia. Mi madrugada no es tu madrugada, Bondagex.
Descúbrete ante mí, dime quién eres, que buscas entre mis lineas, dime que ves desde tu madrugada, a que huele tu camisa, de que color es la sábana que te ha de cubrir, qué sientes, qué eres.
Y por Dios, dímelo, es el ruego desde mi locura, que por fortuna, tampoco es la tuya...
Soy el merodeador. En tus líneas busco la excelencia. Mi madrugada es en blanco y negro: en ella sólo veo tonos grises. Mi camisa huele a mí, no suelo usar colonia. Duermo desnudo, sólo me cubre un edredón. Siento soledad y desesperación. Soy un alma en pena.
No sé si he respondido a tus preguntas. No sé si ya estoy loco o aún me queda un hilo de cordura.
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